Cuando usted no acepta las opiniones de otras personas, cree ser dueño de la moral y le quita la pelota a los otros niños en un partido porque “es mía”, entonces usted es un megalómano y un idiota y así actúa Facebook.
Una red social con millones de usuarios en el mundo que censura a los
que no piensan como ellos, a los que nos negamos a ser políticamente
correctos y usar eufemismos para llamar ladrones a los ladrones,
asesinos a los asesinos y corruptos a los corruptos. Una red social que
después de todos los errores garrafales que ha cometido filtrando
información falsa, siendo el parlante de las fake news, dejando incluso
que se influya en las elecciones de un país, ahora viene a dárselas de
defensores de las etnias y las minorías. Lo peor de todo es que los países se arrodillan siempre a estas grandes empresas que les dan de comer y les frecen dinero fácil, por ejemplo, en Colombia se interpuso una acción en contra de Facebook porque la constitución del país defiende la libertad de expresión, pero Colombia es un país corrupto y la constitución es de adorno así que el juez le dio la razón a la red social. Entonces ¿Cómo se defiende la gente?
Facebook vive de la publicidad, eso si no lo censuran, si usted paga puede poner lo que sea, entonces a nombre de la libertad de expresión de esta humanidad, no use Facebook, sálgase de la red que censura, no sea cómplice de los atropellos a los derechos más básicos de un ser humano. Si a usted le molesta lo que otro publica entonces tiene la opción de eliminarlo de sus contactos, de esconder sus publicaciones, de dejar de seguirlo o de bloquearlo.
El hecho de que las redes sean dueñas de la expresión y la moral es el peor ataque a la humanidad desde el inicio de la historia solo comparable con las dictaduras más radicales y asesinas de todos los tiempos, cuando un ser humano pierde el derecho de expresarse, lo pierde todo.
Ustedes también son cómplices por aceptarlo.